Este viernes Morena resolvió el misterio sobre su candidato para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y anunció que Clara Brugada, exalcaldesa de Iztapalapa, será la contendiente en las elecciones del próximo año.
Esta decisión puso fin a un proceso de nominación que involucró a varios aspirantes, entre ellos Omar García Harfuch, exsecretario de Seguridad de la Ciudad de México, quien lideró la encuesta en la capital, pero se retiró de la contienda debido a las políticas de paridad de género que favorecieron a Brugada.
Ahora, una pregunta clave es cómo reaccionará Harfuch ante esta derrota, con dos opciones ante él: respaldar la decisión del partido y mostrar unidad, o distanciarse y optar por una postura de ruptura. Según fuentes cercanas a Harfuch, se espera que él acate la decisión del partido y apoye a Brugada, aunque esta situación podría dar lugar a desafíos adicionales en el futuro.
Además de la elección en la Ciudad de México, Morena también anunció las candidaturas para los ocho Estados que tendrán elecciones de gubernatura en 2024. Este proceso puso fin a semanas de especulaciones y tensas negociaciones internas, impulsadas por la necesidad de cumplir con la paridad de género en las postulaciones.
De los nueve Estados en cuestión, solo dos mujeres lograron asegurar su lugar como candidatas: Rocío Nahle, exsecretaria de Energía, en Veracruz, y Margarita González, extitular de la Lotería Nacional, en Morelos. Para cumplir con la orden del Instituto Nacional Electoral (INE) de postular al menos cinco mujeres, Morena se decantó por Brugada en la Ciudad de México, Alma Alcaraz en Guanajuato y Claudia Delgadillo en Jalisco. Por otro lado, los candidatos masculinos seleccionados fueron Javier May (Tabasco), Alejandro Armenta (Puebla), Eduardo Ramírez (Chiapas) y Huacho Díaz (Yucatán). La elección en la Ciudad de México generó controversia, ya que a pesar de que Harfuch lideraba en la intención de voto y en otros atributos según las encuestas, se optó por Brugada.
Enfoque de transparencia
La dirigencia de Morena adoptó un enfoque transparente al citar a los aspirantes en cada Estado por grupos para presentarles los resultados de las encuestas y dar a conocer quiénes eran los candidatos más competitivos en cada caso.
En todos los casos, se destacó la importancia de la paridad de género, especialmente para los candidatos masculinos, a quienes se les ofreció un lugar en el Congreso en caso de ser excluidos de las nominaciones.
Este enfoque es parte de un esfuerzo del partido por cumplir con las políticas de paridad de género promovidas por el INE. En algunos Estados, la diferencia entre los primeros y segundos lugares en las encuestas fue significativa, mientras que en otros, la competencia estuvo más reñida. En Veracruz y Morelos, por ejemplo, la diferencia entre los ganadores y los segundos lugares fue mínima, lo que subraya la competencia acérrima en estas entidades.
El proceso de nominación se caracterizó por su longitud y complejidad, y los resultados de las encuestas internas inicialmente estaban programados para ser revelados el 30 de octubre, pero las tensiones dentro del partido retrasaron la decisión hasta el 10 de noviembre.
Este proceso reveló un dilema para Morena, ya que la elección entre García Harfuch y Brugada generó diferencias internas sobre quién debería liderar el partido en la Ciudad de México, una posición clave en la carrera presidencial de Claudia Sheinbaum, a quien se considera la carta del partido para buscar la presidencia.
Se espera que Harfuch, tras renunciar a sus aspiraciones de gobernar la capital, ocupe un cargo en el gabinete de Sheinbaum, particularmente en el ámbito de seguridad pública, una área en la que ha acumulado experiencia desde 2008.
Los criterios de paridad de género, aprobados por el INE a finales de octubre, tuvieron un impacto significativo en el proceso de nominación y llevaron a la necesidad de ajustar las candidaturas para cumplir con estas políticas.
El partido reconoció que al menos tres hombres tendrían que ceder sus aspiraciones para permitir la postulación de más mujeres.
Un acuerdo publicado por la dirigencia del partido aseguró a los hombres sacrificados un lugar en el Congreso, lo que les garantiza una posición en las listas de candidatos plurinominales a la Cámara de Diputados y al Senado.
Esta estrategia se diseñó para apaciguar a los candidatos masculinos excluidos y mantener la unidad dentro del partido.
Respaldo a Morena
A medida que se resolvieron las nominaciones para las gubernaturas, surgió la pregunta sobre si los derrotados en las encuestas permanecerán en el partido para respaldar a los ganadores o si buscarán acomodo en otros partidos. Estos candidatos pueden aprovechar su popularidad en sus Estados como moneda de cambio en futuras negociaciones políticas.
Esta situación representa un desafío para la carrera presidencial de Sheinbaum, quien no solo debe construir consensos a nivel nacional para su proyecto, sino también manejar las tensiones a nivel local provocadas por los morenistas inconformes.
Se espera que estas tensiones se trasladen a las postulaciones para el Congreso y a cargos locales, lo que añadirá complejidad a un proceso electoral que definirá la ocupación de casi 20,000 puestos públicos en el próximo año.
Las elecciones se avecinan, y Morena enfrenta el desafío de mantener la unidad interna y asegurar el apoyo necesario para consolidar su dominio como el partido político más votado en México.
En unidad y con organización, realizamos un proceso histórico en el que escuchamos al pueblo, quien decidió que las y los coordinadores de la defensa de la transformación en las 9 entidades federativas serán:
— Morena (@PartidoMorenaMx) November 11, 2023
Yucatán – @huachodiazmena
Veracruz – @rocionahle
Tabasco -… pic.twitter.com/LhqQzBrsNi