En vista de las inminentes festividades, el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda González, ha instado a las dependencias y fuerzas de seguridad a intensificar sus esfuerzos de cara al cierre de este año. Su solicitud es clara: mantener el orden y la paz social en la ciudad. Sin embargo, la nube de incertidumbre amenaza con empañar el horizonte.

Durante la reunión semanal de seguridad, el edil delineó las directrices para coordinar los esfuerzos con miras a eventos como el Buen Fin, las peregrinaciones, la venta de artículos navideños y las festividades de fin de año. El objetivo declarado es que estos eventos transcurran sin incidentes, garantizando la seguridad de los ciudadanos de Torreón.

Cepeda también expresó su agradecimiento a las instituciones que colaboraron en el operativo de seguridad en los cementerios, destacando el saldo blanco en el Día de Muertos y la asistencia de 90 mil personas sin ningún incidente.

Sin embargo, la sombra de la incertidumbre se proyecta sobre el horizonte de Torreón debido al inminente cambio de gobierno estatal entre el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís y el gobernador electo Manolo Jiménez Salinas a finales de este mes. El alcalde Cepeda subraya la necesidad de que el Municipio genere certidumbre en cuanto a las condiciones de seguridad.

«Nos corresponde a nosotros generarle certidumbre a quien concluye y a quien inicia, desde la parte que nos toca como Municipio», afirmó, aunque la inquietud sobre cómo se desarrollarán estos cambios de poder sigue acechando la ciudad.